El papel crucial de los padres y la escuela en el desarrollo de los niños.

Hoy vamos a hablar del papel tan importante que tienen los padres en el desarrollo de los niños, y cómo influye en su crecimiento y capacidad de progresar en la vida. 

Además, quiero resaltar la labor tan relevante y complementaria que los docentes desempeñan en la vida de los niños, y cómo la Metodología CoEquipo puede ayudarles en esta labor.

Cómo los padres influyen en el crecimiento de los niños y los empoderan para “volar” en la vida.

Cuando nacemos, todo bebé irradia luz propia. ¿Qué podemos hacer para que esa luz lejos de apagarse crezca a lo largo de todas las etapas de su vida?

Cuando un niño nace, lo hace con una capacidad sorprendente de imaginar. En los primeros años de vida, los pequeños juegan sin límites y “vuelan”.

Y son los padres los que tienen la función de marcar y poner esos límites para protegerlos y para cuidarlos.

¿Y qué sucede?

Que nadie nos ha enseñado (sí, me incluyo). 

No hemos recibido formación para ser padres, guías y mentores de nuestros hijos, para poder ayudarles a desarrollar sus talentos (y “volar”).

¿Cuántas veces has escuchado esa frase de “qué difícil es ser padre”? 

Y lo es; sin embargo, cuando contamos con las herramientas necesarias, el camino se allana bastante.

¿Qué quiero decir cuando hablo de “volar”?

Cuando hablo de “volar”, me refiero a la capacidad de visualizarse haciendo algo positivo, algo realmente increíble. Algo grande.

Y es que, el cerebro del ser humano nace con la capacidad de hacer realidad todo aquello que desee de verdad. Para ello tenemos que ser capaces de desarrollar las habilidades y actitudes que nos permitan alzar ese “vuelo”.

Y cuando somos niños, no conocemos los límites. 

Sin embargo, conforme el niño crece y va aprendiendo, esa capacidad de “volar” la va perdiendo poco a poco; ¿por qué ocurre esto?

La mejor gasolina para “volar”, es el amor: si un niño se rodea de amor, su luz le acompañará desde el principio.

El niño en sus primeros años de vida busca en su mamá, o en aquella persona que asume el rol de mamá, ese amor. Si el bebé recibe ese amor maternal y se le brindan rutinas cargadas de amor, será feliz y seguirá “volando”.

Es muy importante que un niño en sus primeros 12 -13 años de vida, sienta el amor de sus padres.

Luego, en la adolescencia, ese niño deberá aprender a buscar el amor en él mismo.

Y yo te pregunto, ¿crees que tu cerebro puede hacer aquello que no aprendió cuando era más pequeño?

La realidad es que es muy complicado y es por eso, que es tan importante que se sienta amado en la primera etapa de su vida.

Esa etapa en las que los pequeños son absolutamente dependientes.

“El vínculo familiar sólido y amoroso se convierte en el cimiento sobre el cual nuestros niños construirán su confianza, seguridad y autoestima”

La presencia y participación activa de ambos progenitores son esenciales para criar a niños equilibrados y seguros de sí mismos. 

A medida que crecemos y nos convertimos en niños, seguimos necesitando a nuestros padres. El cerebro viene programado para hacer la conexión con la madre y el padre biológico. Si eso no ocurre, es importante que desde pequeños se les cuente qué pasó, para poder así hacer el anclaje con esa persona que cumple el rol de mamá o papá en su vida.

En la sociedad moderna, los roles de madre y padre pueden ser compartidos. No tiene nada que ver con el sexo, y en las familias de hoy en día se comparten. 

El rol de mamá ayuda a tener una vida ordenada, organizada, unas rutinas en el día a día.

Lo normal es que en una unidad familiar de la actualidad, haya un miembro que sea el que pase más tiempo con los niños en sus primeros años de vida: será la persona que desempeñe el rol de madre, y otro que “renuncie” a ese tiempo en favor del trabajo. En este caso es cuando estaríamos hablando del miembro que desempeña el rol de padre.

Además de esta labor de amar de forma incondicional, los padres tienen otro papel fundamental en las vidas de sus hijos: guiarles hacia su propio crecimiento y autonomía.

• Es muy valioso fomentar un ambiente que les permita explorar, descubrir y aprender de sus experiencias
• También, alentarles para tomar decisiones, afrontar desafíos y aprender de los errores. 

La presencia de los padres para brindarles apoyo y guía en cada paso del camino, es crucial para su desarrollo integral.

Si un niño nace en una familia donde ambos padres se quieren y están presentes, si la madre y el padre hacen un buen tándem, están cohesionados, la vida de ese niño será más fácil. 

Pero eso no siempre sucede. Y eso afecta directamente en el crecimiento del niño.

“La historia de vida que nos tocó, marca mucho lo que somos hoy”.

¿Y qué sucede cuando se crían en entornos más complicados?, ¿les marca y condiciona? 

A veces, me preguntan si la situación familiar afectará al desarrollo de un niño.

La respuesta es que sí, pero incluso si nacemos en una familia difícil, es posible trabajar en nosotros mismos: entender, aceptar y dejar atrás lo que no nos gustó de nuestra historia, y aprender de lo que vimos en nuestros padres.

De la infancia a la adolescencia: Cómo guiar a los hijos en su proceso de independencia.

Cuando llega la adolescencia, el proceso cambia: ahora es el momento de ir soltando la mano de los padres y en busca de una mayor independencia. 

Durante esta etapa de desarrollo, los padres deben adaptar su enfoque, brindando a los adolescentes el espacio para tomar decisiones y asumir responsabilidades, al mismo tiempo que continúan ofreciendo amor, apoyo y orientación emocional.

Los padres deben estar dispuestos a escuchar y comprender a sus hijos adolescentes, estableciendo límites claros pero flexibles, y promoviendo la confianza y la comunicación abierta para ayudarles a afrontar los desafíos propios de esta fase de la vida.

En esta etapa, es importante aceptar la transformación del cuerpo, aprender a verse y creer en uno mismo, y darse amor. 

El problema está en que esto no nos lo enseñan, y ¿qué sucede? 

Que vamos a buscarlo fuera.

¿Dónde?, entre los amigos o las parejas. 

Y se corre el riesgo de convertirse en una persona dependiente.

Por eso es esencial aprender a mirarse, conocerse y aceptarse tal como somos, con nuestras imperfecciones. 

“Amar las imperfecciones te dan seguridad”.

Sería fundamental que esto nos lo enseñaran en la adolescencia.

¿Qué sucede si el adolescente ha construido esa conexión consigo mismo?

Cuando se logra esa conexión con uno mismo en la adolescencia, no se deja de “volar”. 

En la adolescencia es el momento de tomar esas responsabilidades que antes habían llevado sus padres: 

• – Ahora tiene que organizarse, 
• – decidir qué quiere hacer y cómo…

Y si el adolescente conectó consigo mismo, ocurre algo mágico: es capaz de continuar “volando”.

Una de las consecuencias más habituales si esto sucede es que son personas que sienten que el tiempo pasa muy rápido.

Por tanto, una alerta a tener en cuenta es que si el adolescente siente que el tiempo pasa demasiado lento, entonces es momento de parar. Algo está pasando. 

¿Y qué sucede?

El camino fácil es poner la cámara enfocando hacia fuera y buscar “a los culpables fuera”, no dentro de uno mismo. 

Esto es muy común que suceda en la adolescencia, y en la edad adulta.

Y evidentemente, esto hay que trabajarlo.

“El ser humano tiene una capacidad ilimitada a pesar de las dificultades”.

Familia y educación: Claves para criar niños seguros, motivados y creativos.

Pero la educación no recae en exclusiva en el ámbito familiar: la educación se complementa con el ámbito académico. 

Es importante señalar el papel fundamental que tienen los profesores en las distintas etapas de crecimiento de los niños: los profesores desempeñan un papel complementario al de los padres, ya que pueden proporcionar conocimientos, orientación y apoyo adicional en el proceso de aprendizaje.

Los profesores son figuras clave en la educación y el desarrollo de los niños, porque pasan una cantidad significativa de tiempo con ellos fuera del entorno familiar. 

Los profesores pueden contribuir al crecimiento de los niños y a fomentar un ambiente educativo positivo y estimulante.

Los profesores desempeñan un papel fundamental en el desarrollo de los niños, brindando conocimientos, orientación y apoyo adicional en su proceso de aprendizaje. 

Es valioso contar con un ambiente educativo positivo y estimulante para asegurar el crecimiento integral de los niños. Por eso, la colaboración entre los padres y los profesores es crucial, ya que trabajar juntos en beneficio del niño es fundamental. 

La comunicación abierta y constante entre ambas partes permite compartir información relevante, establecer metas comunes y abordar cualquier desafío o dificultad que pueda surgir en el proceso educativo.

Por qué es importante la colaboración entre las familias y la escuela.

Es necesario establecer una relación sólida y positiva entre las familias y la escuela, con el objetivo de brindar un apoyo integral a los niños en su crecimiento y desarrollo.

Esta colaboración es esencial para proporcionar a los niños un ambiente coherente y enriquecedor que promueva su aprendizaje, bienestar emocional y social. Además, la colaboración entre la familia y la escuela puede influir positivamente en el rendimiento académico de los niños, su motivación para aprender, su autoestima y su desarrollo de habilidades sociales.

La Metodología CoEquipo en los centros educativos.

Y es que nuestra metodología trabaja de forma conjunta con los profesionales del centro educativo, las familias y el alumnado.

Nuestro objetivo es sacar lo mejor de las personas, sabiendo que, para adaptarse a un entorno de volatilidad, incertidumbre, complejidad y ambigüedad (VUCA), se requiere de mucha proactividad, altas capacidades para el cambio continuo y la creación de ideas y conocimientos de gestión emocional. 

Con nuestra metodología apoyamos a los Centros Educativos en la transformación ycrecimiento del equipo de trabajo que engloba la Comunidad Educativa (maestros,alumnos y familias) modificando la forma de aprender y de enseñar, tanto dentrocomo fuera del aula, para desarrollar el talento de cada individuo y alcanzar el equilibrio en la vida.

CoEquipo puede ser el motor de innovación de tu Centro.

La metodología CoEquipo te facilita el camino hacia una mejor versión, partiendo de la esencia de tu Proyecto Educativo de Centro y de la de cada uno de los integrantes de tu equipo humano.

Sobre la base de todo esto, os planteamos una formación confeccionada exclusivamente para vuestro centro y sus circunstancias.

Los Centros Educativos que funcionan desde la metodología CoEquipo poseen un valor añadido: independientemente de la titularidad, el modelo educativo y metodología que ofrezcan, están formando a sus maestros, alumnos y familias en la gestión emocional indispensable para conocerse a uno mismo, para adaptarse a los cambios y para utilizar los miedos como motor en la vida.

“Formamos y desarrollamos personas emocionalmente inteligentes”.

Si estás interesado en conocer cómo podemos ayudarte y los detalles de los programas que diseñamos para los Centros Educativos, ponte en contacto conmigo a través de este formulario.

Elena Martínez del Hoyo Vázquez
Creadora de la Metodología CoEquipo

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